Nave Dragón ya está fuera, lista para regalarnos muchas alegrías

La Nave Dragón de Lola Indigo ya ha despegado. El pasado viernes, la artista estrenaba, por fin, este álbum que tanto se ha hecho de rogar. No es ninguna sorpresa el saber que la de Granada nos iba a dar en este cuarto disco una buena sesión de reggaetón, y es que lo que durante semanas se preveía con los avances de sus canciones, se ha cumplido con creces: un disco para bailar de principio a fin, para cantarle al desamor, al empoderamiento, para quererse y, sobre todo, para disfrutarlo.

Son muchas las canciones que destacan en este nuevo álbum, compuesto por once canciones, cinco de ellas inéditas y cuatro colaboraciones. La reina sigue estando en el número 1 y no muy lejos se queda 1000COSAS con Manuel Turizo, aunque Sin autotune viene pisando fuerte. No obstante, parece que en este disco hay muchas cosas que todavía no hemos descubierto… o sí.

La colaboración semi escondida de Lola Indigo
Los avances de las canciones apuntaban maneras, incluso alguna despuntó más que otra. Por ejemplo, Mi coleta, fue una de ellas. 45 segundos nos bastaron para saber que este tema entraba dentro de los estándares del reggaetón y que iba a gustar a los amantes de este género porque, al final, la letra no dejaba de tener esa seducción que tanto engancha al público de Lola Indigo.

Quevedo participa en la canción “MI COLETA” de @lolaindigomusic pic.twitter.com/M4PxXbh4WQ

— QuevedoINFO (@dqequevedo) March 27, 2025

Sin embargo, además de por el poderío que desprendía la artista en el vídeo, fueron muchos los que cuestionaron si se trataba de una colaboración porque se escuchaba una voz de fondo, incluso algunos se mojaron y se atrevieron a decir que era de Quevedo.

Lo cierto es que es una verdad a medias y tan equivocados no estaban. Vale, sí, el canario no forma parte de manera directa en la canción, pues el tema lo interpreta únicamente Lola Indigo, pero sí lo hace de manera indirecta. Y es que, tras bichear los créditos de la canción, Pedro Luis Domínguez Quevedo, más conocido como Quevedo a secas, forma parte de ella.